Una ruina
Habíamos pasado por la casa hacía cinco meses, pero nos volvieron a llamar, había una denuncia por ruina. Cuando mi equipo y yo llegamos estaban acabando su trabajo los del ayuntamiento: “los bomberos siempre llegáis tarde” nos recibió cachondeándose Pedro Pérez, el jefe de los arquitectos municipales. Desde fuera la casa no presentaba signos de deterioro, la famosa mansión de los Menéndez, tenía más de doscientos años, plantada en lo alto de una colina, en su origen solitaria, ahora desde…