La ceguera.
Me quedé ciego a los 30 años. De una manera progresiva: dos sencillas operaciones de cataratas, que se complicaron y en tan sólo unos meses me quede con un diez por ciento de visión. Emocionalmente fue para mí un mazazo, había perdido las posibilidades de trabajar, de mantener a mi familia, de ver a mis seres queridos…tuve una depresión, que tras cuatro meses de no poder levantarme de la cama me diagnosticaron como mayor, Salir de ella fue difícil, mucha…