Michi
Era un gato de color canela y ojos verdes, que respondía al nombre de Michi. Su humana se llamaba Karen y lo había recogido de un contenedor de basura. Los dos convivían en un clima de cierta paz. Karen era ordenada y mandona. El gato era un trasto, algo egocéntrico y maniático. Michi era especialista en tirar al suelo todo objeto al que pudiera tener acceso. La humana le había comprado al minino una torre de ejercicios, forrada de esparto…